El proceso de inmunización contra los efectos graves de la COVID-19 avanza y ya les llegó el turno a los mayores de base cinco. Los chicos y chicas de la edad de oro estarán más protegidos; por fin.
Con el fin de ayudarlos a
que la inoculación sea exitosa, te brindamos algunos consejos.
- Administra tu tiempo,
recuerda que además de esperar tu turno en la cola, tendrás que leer y firmar
el consentimiento informado, pasar por triaje con los médicos para finalmente
recibir la inyección. Así que como te indican en el portal
[consultas.pongoelhombro.gob.pe], imprime el consentimiento antes de ir.
Y mucha atención con el
lapso del descanso en la zona de observación, pues varía entre 20 a 30 minutos.
- Haz una lista de todas
las preguntas que tengas para los licenciados en enfermería y los doctores. Que
no queden dudas.
- Más vale prevenir...
sin perder la cordialidad. Debido a los reportes aislados de jeringas vacías es
recomendable que te mantengas atento a la recarga de la sustancia ingresada.
Entonces, aunque la vacunación será casi un acto histórico en tu vida, es mejor
que dejes los “selfies” para otro momento.
- Los héroes sin capa.
Por favor, no perdamos la amabilidad con los enfermeros que están haciendo una
labor maratónica pinchando hombros en plena pandemia.
- Ten en cuenta que la
protección después de la primera aplicación de la vacuna empieza después de dos
semanas. Si te quedaras sin la segunda dosis, es posible que ese blindaje
decaiga. Por eso es importante que acudas a tu segunda cita luego de 21 días
aproximadamente. Ahí lograrás la respuesta también a las dos semanas
posteriores.
-Reclama tu cartilla de
vacunación con la fecha de tu segunda dosis.
- Por ningún motivo te
creas el bacán, superhéroe o superheroína. Que estés inmunizado no significa
que no puedas contagiar ni ser contagiado de coronavirus, pero si estarás más
tranquilo. Sigue con la guardia en alto. ¡A poner el hombro! (Foto y texto: A.A.V.)