Mis días en la isla del mambo. Un "break" en el blog Tremendas Tendencias.
Cuba es el país de la música, el ron y
el sol interminable. Al llegar, uno no deja de agradecer a la naturaleza por
brindar tanta belleza enmarcada por el mar, esa es la primera sensación de los
viajeros –acostumbrados a la tierra–, al pisar esta isla caribeña.
El vuelo de Lima a La Habana dura seis
horas, las primeras imágenes del país de José Martí y Celia Cruz son sus llanos
verdes, aunque también posee una zona de medianas montañas llamada Sierra
Maestra que no está a primera vista, pero que resulta un excelente destino
ecoturístico y también histórico, pues fue aquí donde se forjó la revolución.
Antes de gozar de las aguas turquesa de
Varadero es conveniente visitar la capital, no habrá arrepentimientos. Sus
monumentales construcciones (El Capitolio, la Universidad de La Habana, el
Hotel Nacional, el Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, sus fortalezas,
teatros, malecones) y lugares de diversión como Tropicana son imperdibles.
Pueden pedir un tour a la agencia de viajes (pregunten si tiene costo
adicional); buscar guía particular (acuerden bien los servicios para no sufrir
decepciones) u optar por el bus turístico (a solo 5 Cuc).
Monedas
convertibles
Eso sí. Es importante que se informen
sobre la existencia de dos monedas en Cuba: el Peso cubano para los isleños y
el Peso cubano convertible (Cuc) para los turistas. Lo mejor es llevar euros
para cambiarlos por Cuc’s, pues resultan más rentables que el dólar (€ 1 equivale a 1.026 Cuc,
contra US$ 1 a 1 ó 0.90 Cucs). Al momento de buscar artesanías, opten
por los negocios personales (en tiendas pequeñas) o “paraditas” donde resultan
más cómodas. Otras alternativas para regalar son los rones (el mejor es el
Havana Club), los habanos de distintas calidades y las cervezas Cristal o
Bucanero.
No dejen de brindar con mojitos o probar
la rica Ropa vieja, un guiso con carne deshilachada acompañada de arroz con
frejoles negros.
El
paraíso
El camino hacia Varadero, en la
provincia de Matanzas, al este de La Habana, está poblado de plantas de gas,
petróleo, bosques, casas antiguas. En Varadero, las playas son públicas, sin
embargo, cada hotel pone a disposición de sus hospedados un pedazo de esa
enorme franja de 22 Km de arena blanca y agua cristalina.
No se preocupen por la seguridad, pues
todo el personal siempre está vigilante para que su diversión no se vea opacada,
ya que los hoteles ofrecen actividades diarias como clases de baile, concursos
de bañistas, degustación de ron –el más oscuro es el más refinado. Y también
hay variedad de promociones para las parejas de enamorados, sea una bienvenida
especial o la organización de su boda.
Cuba,
tierra fértil
Como se sabe, el gobierno a cargo de los
hermanos Fidel y Raúl Castro, ha impuesto la igualdad a la vez que la falta de
libertad. Algunos hermanos cubanos, sobre todo los de más edad, tienen miedo de
contar su realidad por temor a represalias. Es que la vida para el ciudadano de
a pie es difícil. Su salario básico es de aproximadamente 250 pesos, siendo los
médicos los más “privilegiados” con 300 mensuales, cantidades insuficientes
para comprar los productos que no alcanzan de la Libreta de abastecimientos
estatal (canasta familiar). Todos en la región esperan que la apertura de Cuba,
traducida en facilidades a sus habitantes para formar pequeños negocios; cordiales
encuentros de Raúl Castro con el Papa Francisco; el restablecimiento de las
relaciones diplomáticas con Estados Unidos y el pedido del fin de la represión
contra libertades básicas a cambio de la suspensión del embargo comercial por
parte del régimen de Barack Obama, abren una luz de esperanza para la felicidad
y prosperidad de una república que tiene tantas maravillas que ofrecer al
turista. Sol y amor por siempre. (Por: A.A.V., desde Cuba - Agradecimiento: Isabel Reyes).
